jueves, 27 de abril de 2023

Marihuana

 

Marihuana

Aumentan en Lleida las operaciones policiales dirigidas a desmantelar plantaciones de marihuana.   Parece ser que las organizaciones mafiosas eligen el territorio leridano por la laxitud de las penas en comparación con otros países y por el rendimiento económico de la explotación agrícola.      La parte mediática de la operación es la cada vez más habitual batida policial, una intervención que suele durar unas horas, pero hay antes un largo y minucioso trabajo de investigación al que se añade el proceso penal posterior, con la carga laboral que supone para los sistemas policial y judicial. El debate sobre la regularización de la marihuana es viejo y manido, sin embargo, hoy en Lleida es necesario. No se sostiene que sea legal comprar en cualquier lado 6 botellas de vodka, dos de ron y dos cartones de Marlboro mientras si te enganchan 6 gramos de hachís tienes un problema con la Ley. No tiene sentido.  Regular el mercado de la marihuana es una política interesante desde un punto de vista fiscal y sanitario. Digo fiscal porque la tributación de la actividad económica vinculada a esta droga es una via muy interesante para aumentar los ingresos públicos. También es útil desde un punto de vista sanitario: siempre es recomendable que el Estado conozca, regule y supervise las sustancias que circulan en la sociedad, aunque sean nocivas para la salud, ya lo hace, insisto, con el tequila, el Camel sin filtro o las grasas saturadas, por ejemplo.  Además, regulando este asunto descargaríamos a las fuerzas policiales y a los tribunales de justicia de una carga de trabajo valiosísima para perseguir otros delitos que, creo, inquietan más la sociedad, neutralizando a su vez las mafias que se lucran en la ilegalidad. Quién sabe si algún día la marihuana será un producto de proximidad de les Terres de Lleida, de l’hort a taula o millor dit:  de l’hort al sofà.