viernes, 27 de marzo de 2015

Que l'Aplec duri una setmana.

 Lleida som un territori intel·ligent i humil, per això ens agrada riure’ns de nosaltres mateixos. A un lleidatà autèntic li agrada la conya i és foteta per naturalesa, sense arribar al sarcasme. Som carrinclons, però no estem per fer volar coloms i som assenyats a l’hora de la feina ben feta. Si analitzem des d’un prisma lleidatà la idea que l’Aplec del Cargol duri una setmana hi trobarem tota la il·lusió carrinclona que vulgueu, però en la pràctica no supera una anàlisi assenyada "y lo sabes”. Les activitats culturals que organitza la FECOLL al volant de l’Aplec ja fa anys que duren una setmana. Ara pensem què suposaria mantenir, a més a més,  les 100 Colles obertes set dies i set nits.

lunes, 9 de marzo de 2015

La fuerza de un partido.

En mayo de 2011 colgué aquí un post titulado #acampadalleida. Ese artículo quería ser una reflexión sobre la importancia de organizarse para conseguir una finalidad política. Decía que los movimientos de #acampada estaban condenados al fracaso si no se articulaban como partidos políticos al uso, actuando como un virus informático infiltrado en el sistema para cambiarlo desde dentro. La militancia política exige organización de voluntades en torno a objetivos comunes. Sino fracasa. Que le pregunten a PODEMOS cómo se puede trasformar mejor la sociedad; si acampados en una plaza, o estructurados en órganos deliberativos y ejecutivos dirigidos por un ‘alto mando’. Dicho de otra manera, no se engañen, organizados como un partido tradicional. La Iglesia ha durado 2000 años como organización entre otras cosas por respetar liturgia y jerarquía. El PSC y el PSOE son grandes partidos porque sus miembros respetamos la organización; que es como decir que respetamos los liderazgos surgidos de los procesos democráticos, se llame Pedro Sanchez, Àngel Ros o Pere Navarro. Respetamos las decisiones tomadas por los órganos competentes, por ejemplo aquella famosa del Consell Nacional de votar no a la consulta secesionista.